Cuantas veces buscaste este corazón Sensible a tu presencia y a tu dulce voz Cuantas veces lloraste en tu aflicción Pues la copa que bebiste /no era para mi/ Era para mi, ese dolor Era para mi, esa cruz Era para mi esa copa que tomaste Esa lanza en tu costado fue por mi Y hoy sere, tu siervo fiel Aquel que ayuda en tu redil Hoy mi vida entregare Como ofrenda agradable, ante tus pies Era para mi, ese dolor Era para mi, esa cruz Era para mi esa copa que tomaste Esa lanza en tu costado fue por mi