Permita que le diga que la quiero que por usted soporto este aguacero y muero si me mata aquel veneno del manantial que nace de su cuerpo. Permita que le diga que la quiero. Permita que le diga que la sueño que guardo en la memoria cada beso, incluso aquellos que jamás me dieron, que dudo si los debo o los merezco. Permita que le diga que la sueño. Te juro que si me abro el corazón caben más cosas que en el Arca de Noé. Te juro que me bastan dos palabras: polvo soy y en polvo te convertiré. Te cubriré con sábanas de luna. Permita que le diga que la quiero que sólo con mirarla me entretengo. Quisiera ser un perro entre sus huesos, volverla del revés meterme dentro. Permita que le diga que la quiero. Permita que le diga que la sueño pero es una cometa por el cielo, que a veces corta el hilo y marcha lejos y el vértigo que siento es casi miedo. Permita que le diga que la sueño.