En la noche vi aquella señal, las estrellas brillando firmes; y hoy el tiempo se detendrá y el silencio será testigo. En el cielo buscaron lugar, y en la tierra serán los reyes y los hombres les temerán, pues su magia se hará presente. Sus huellas seguirán, sus nombres pronuncia el fuego; Mareas danzarán . . . el batir de sus alas al viento; Sus ojos buscarán el hechizo que está en tu mente. Las palabras hicieron llegar, las tormentas creadas por seres; que en su aliento pueden quemar y en sus sueños crear visiones. En la costa las sombras verán, en la lucha se entrega a la muerte; las palabras hoy cesarán y en su manto el arma hiriente.