Rubén Blades

Isabel

Rubén Blades


Parpadean los cielos confundiendo sombras 
y el agua comienza a caer; un presentimiento 
aún sin nombre envuelve a Isabel. 
Libera un pasado cargado en recuerdos más 
dulces que su realidad; cada vez que el cielo 
se quiebra los siente llegar. 
Todo es posible y nada se pierde en Macondo. 
Hasta sus fantasmas rehúsan ir a otro lugar. 
Isabel siente la lluvia en Macondo darle olor a su 
soledad y explicación a su ansiedad, borrando el pecado.
Llueve en Macondo; relámpago, limpia un dolor 
ancestral. Sonríe a tu entraña pues todo es posible 
cuando uno revive el ayer; el tiempo no existe, ni el 
miedo a lo que hubo una vez. 
A hierba mojada, a tierra encantada, hoy huele a 
nostalgia el jardín. Cien años resbalan, misterios que 
no tienen fin. 

Cae agua de luna en Macondo, 
limpia un pecado inmortal.