Si tu cuerpo estas montañas fueran, Yo seria hace tiempo un vagabundo arropado de suspiros y tu incienso Que moraría en tus entrañas, entre cuevas, musgo y viento. Si solamente por un día fueras ese sueño, me detendría en el tiempo. Si tu cuerpo estas montañas fueran, abriría en la espesura de los bosques, caminos y veredas con afán de acariciarte Con mis pies y manos torpes, tu clara y suave piel de tierra. Y sembraría en un lugar inaccesible mi esperanza para que nunca muriera Rosa bella, si tu fueras este aire y tierra esperaría feliz la madrugada, Y aquel instante en que naciera la esperanza, fiel seria como el sol que iluminara tu cara. Si dejaras que el cielo te diera, tu amanecer seria mi luna y mis estrellas. De tu espacio inmenso yo te llenaría de puro amor y deseo, Si tu cuerpo estas montañas fueran, treparía por tus muslos, sorteando escalofríos entre surcos y quebradas Y alcanzándote los senos gritarías de deseo, al jurarte amor eterno, Y al conjuro de ese baile, y colmándote de besos sabrías cuanto te quiero. Y agotado yo descendería hasta el valle que se extiende cerca de tu vientre Y bebería de ese agua tibia y transparente, agotando de deseo un manantial tan complaciente, Y en tu espacio inmenso yo me sacrificaría, para nunca mas perderte.