Queremos que te quedes, Micaela Como quedaba el barro entre tus botas Pero tu nombre trepa las banderas Como trepa el dolor que nos azota El mundo que habitaba tu sonrisa Se prende en nuestros pasos como abrojo Recetas para el hambre y la injusticia Ahogaban los jardines de tus ojos Los pibes y las pibas se preguntan Cuándo regresa el ángel de tus manos Y saben que tu vuelta se fecunda Cuando no pasen hambre sus hermanos Y cuando se derrumbe para siempre La eterna dictadura de los machos Cuando las rejas le nublen la frente Al juez que te mataba en su despacho Queremos recordarte, Micaela Que nunca este dolor es resignarse En el camino hacia la primavera Es flores de los sueños que soñaste