Alguien puso bajo el sol su verdad por la mañana; la verdad se le secó. La verdad se le secó porque no estaba mojada, más bien estaba empolvada, casi nada. Unos hacen el amor para vivir sin reservas, otros le tienen temor. Y si es la vida el amor y si el amor es la vida, ¿a qué cosa es su temor, a la vida? El que cruza sin mirar un obstáculo cualquiera se queda por la mitad. Pues, si al lanzarte a la meta llevas los ojos cerrados... ¿cómo sabes dónde está? Tú sabrás. Unos hacen por llenar sus humanidades huecas, otros las dejan igual. Por eso es que cualquier cosa que me llene me apasiona: para hueco está la fosa... ¡Mariposa, a otra cosa!