A la larga, uno se va dando cuenta De que tenemos heridas, que se nos quedan abiertas Son como cuentas pendientes Son preguntas sin respuesta Y en medio del silencio, la noche nos las acerca Y nos mantienen en vilo, hasta que el sueño las aleja Y nos vence el cansancio de darle vueltas y vueltas Porque no dejan de ser preguntas sin respuesta Eres tú, mi cuenta pendiente Eres tú, la agonía que, que me fragela Eres tú el ocaso que me apaga Eres tú el insomnio que me desvela Eres tú la puñalada trapera Eres tú la amargura de mi vida Eres tú el recuerdo que me desgarra Y eres tú mi último pensamiento del día Son como goteras, en el techo del olvido Gotas que caen a una hora Y te aturden el oído Que te mojan el alma Y aunque amanezca seca De la mano de la noche Siempre vienen de vuelta Eres tú, mi cuenta pendiente Eres tú, la agonía que, que me fragela Eres tú el ocaso que me apaga Eres tú el insomnio que me desvela Eres tú la puñalada trapera Eres tú la amargura de mi vida Eres tú el recuerdo que me desgarra Y eres tú mi último pensamiento del día Eres tú el sudor de mis pesadillas Eres tú ese demonio que llevo dentro Eres tú la sombra de las esquinas Eres tú y sin embargo de quiero Eres tú