Acariciando la vida te fuiste y ,al caminar, apareciste en un sueño, en que no quisiste entrar. Así te parió esta vida, como queriendo jugar, te metieron en el baile sin enseñarte a bailar. Y te echaste a correr, cansado de caminar, saliste a abrigar un sueño, que no querías cambiar. Te sacudirán hasta caer, pero sabés volver a empezar; vas andando los caminos que elegiste andar, se van abriendo senderos que invitan a andar, que van a estallar. Paciencia increíble tuviste que hallar, paciencia de muchos que esperan acá. Corazones rotos, que invitar a andar. Corazones locos que encienden las almas, que van a estallar.