Hoy que has sentido La impaciencia de tu piel Puede que sea Mucho más fácil comprender Que del pasado No queda más que El viento de un amanecer Dónde la flor se arranca El pasto ha de crecer Por el cauce de tus huesos se fatigan Los inviernos de mi ser Como espina cada aliento Pues ya no hay más ¡Qué respirar! Yo sé que quieres Ordenarle a la razón Que acalle el grito Que se ahoga en tu corazón Que has encontrado La forma de pedir perdón sin claudicar Pero eso no Es lo que yo quiero escuchar No soy tu candil Ni tu pedestal No soy el espejo en el que intentas aliviar Tu soledad Soy la risa En la ruina de la noche Mezclo en trazos grises Tu vanidad y tu derroche Soy aquella voz Que balbuce una verdad La palabra muda La sombra desnuda Soy ¡Tu realidad! Soy la risa En la ruina de la noche Mezclo en trazos grises Tu vanidad y tu derroche Soy aquella voz Que balbuce una verdad La palabra muda La sombra desnuda Soy ¡Tu realidad!