Siendo tu alma pura
Tan noble y sencilla
Un negro crespon
Puse en tu corazón
Con las manos juntas
Iré de rodillas
Rogando mis labios
El ansiado perdón
No supe apreciar
Lo real de lo falso
Ni caricias francas
Ni aún gratitud
Cómo fue posible
Olvidar las auroras
Con su luz de vida
Cómo fuiste tu
El cielo pondrá
En su mensaje de paz
De nuevo el Sol
Nuestras vidas guiarán
Por los senderos
Que no habrá añoranza
Su franja radiante
Señal de esperanza
Traerá la bonanza
Juntos los dos
Hallaremos la fe
Que nos unió
La no muerta ilusión
Y en el celeste
De tu firmamento
Brillará la antorcha
Dé mi corazón
