Como la luz que besa la mañana, nacida en una noche sin estrellas, cual transparente mariposa bella, hincada frente a una flor que tibio exhala, llego a tu siempre sin batir las alas, para ofrecerte a ti volar con ellas. Desde el intrépido país del siempre todo, donde la altura pisa el firmamento, donde el tiempo te nace eje en su intento de reinar en lo inmenso de su modo , te ofrezco un vértice, raíz, mis codos y mi frente a tus plantas rezo adentro Nomás te ofrezco, porque lo imposible, murió en silencio cuando se mirarte, y ya no hay nada con que compararte aunque la nada se muestre accesible. Me queda un beso, no sé si es posible decirte todo lo que puedo amarte. Y si acaso no fuera porque existes desde el tiempo feliz de tu verdad cada cosa moriría lentamente solamente de saber que tu no estás. Y si pienso en el amor que tu me diste es tan grande como fue mi soledad. En un beso mi silencio se estremece y florece como el lirio de tu altar. Solo por ti, hoy creo en mí, toda mi vida, sangró una herida, sin ti. Y si acaso no fuera porque existes desde el tiempo feliz, de tu verdad cada cosa moriría lentamente solamente de saber, que tu no estás. Y si pienso que el amor que tu me diste es tan grande como fue mi soledad en un beso mi silencio se estremece y florece como el lirio de tu altar. en un beso mi silencio se estremece y florece como el lirio de tu altar.