Noche. Verde caracol, la luna. Sobre todas las terrazas, blancas doncellas desnudas. ¡Remadores, a remar! De la tierra emerge el globo que ha de morir en el mar. Alba. Dormíos blancas doncellas, hasta que el globo no caiga en brazos de la marea. ¡Remadores, a remar! Hasta que el globo no duerma en las gargantas del mar.