Vengo a decirles compañeros míos ¡Llegó el verano! ¡llegó el verano! Luego verán los árboles llorando Viendo rodar sus vestidos Los que han tendido con tanto placer Porque el invierno con gusto les da Uno por uno se ven decaer ¡Ahora a los campos les toca llorar! Voy a buscar un árbol corpulento ¡Veranero! ¡veranero! Para que cuando llegue el mes de enero ¡Tener mi negocio hecho! Aprovechar el momento feliz Porque en la vida me gusta gozar ¡Quien no aprovecha no sabe vivir! En el verano no hay donde sombrear Si yo consigo el árbol que yo quiero ¡De sombrío! ¡de sombrío! Del que no tiene solito me río Bajo mi árbol veranero Y me acarician los rayos del sol Uno por uno se acercan a mí A iluminarme con su resplandor Para que pase el momento felíz Poco se ven los árboles sonrientes ¡En el verano! ¡en el verano! Más bien se ven los campos destrozados Por las brisas del nordeste Las nubes pasan con su vanidad Formando huellas de brisa a montón Las hojas débiles caen con dolor ¡Sobre la tierra les toca rodar! Cuando los árboles están deshojados ¡No los miran! ¡no los miran! En ese instante sufren la honda herida Que les produce el verano En esos meses no viven feliz ¡Van azotados del viento y el sol! Las tristes hojas les toca vivir Pálidas, secas, sin ningún valor Viene febrero sin haber frescura ¡En nuestra tierra! ¡en nuestra tierra! Luego entra marzo; se ven las blancuras Mostrando la primavera Luego entra marzo ¡En la tierra se ve Otro semblante de felicidad! Viene la lluvia, la brisa se va ¡Las verdes hojas vuelven a nacer!