Trataba de conquistar una idea, una dama por los tejados. Te deslizas dormida camino de París. El amor se despide por un momento, el verano se lo lleva lentamente. Te deslizas dormida por los raíles del tren. Mañana la distancia será seria, sería fácil acortar esas milésimas, convertir ese rumor en unos pasos, dejar que el tren se vaya sin ti. Te deslizas cansada por los raíles alemanes, detrás me quedo yo sin tus caricias suspendido en un sillón de orejas. Así como lo oyes, así como lo ves. Trataba de conquistar una idea, una dama por los tejados. En Hamburgo te esperan en la radio y yo me quedo aquí bebiendo horchata en Alboraya, Valencia.