En un país de ensueño, un día no lejano yo Habitaré Junto a Jesús que un día, por mí en la cruz Quiso padecer Y cuando escuche mi nombre diciendo Bendito de mi Padre ven Daré la gloria al Cordero porque Él me sostuvo Me ayudó a vencer Daré la gloria al Cordero porque Él me sostuvo Me ayudó a vencer Me acercaré despacito, al trono glorioso de Nuestro Señor El resplandor de Su gloria, de brillante luz mi Ser vestirá Veré sus manos heridas, también su costado Y le adoraré Qué glorioso será el día cuando junto a Cristo yo Habitaré Qué glorioso será el día cuando junto a Cristo yo Habitaré