Desde la mañanita hasta el anochecer ni un momento se quita del balcón la niña Esther. Aún no tiene catorce, brilla de juventud pero la chiquita quiere un príncipe azul ¿Qué pasa…muchacha? ¿Qué quieres que no tengas junto a ti? Métete Teté que te metas Teté. Métete Teté que te metas Teté. Métete Tete, no lo repetiré, eh, métete Teté Lágrimas o consejos no la pueden convencer, sigue en los balcones y a los lejos mira Esther. Solo pasan morenos y uno que otro gandul pero nuestra niña quiere un príncipe azul. Escucha… pequeña ¿Qué harán tus muñequitas ya sin ti? Métete Teté que te metas Teté. Métete Teté que te metas Teté. Métete Tete, no lo repetiré eh, métete Teté.