Mientras miro en el espejo Este canoso y cruel reflejo Que suspira ásperamente Estas palabras: Te acordas ahora atorrante, de la joda Tus mujeres, de la barra inseparable que creció Y que un día el tiempo se encargo, De separar sus vidas sin razón. Y ese amor que por cobarde No pudiste confesarle, Te carcome la conciencia Pensar que pudo haber sido aquella la mujer, Que te acompañara hasta el final. Sus delgadas piernas se alcanzan a ver Por su vestido escotado. La suave y fresca brisa Hizo a un lado su flequillo Y con los ojos rojos dijo: “ya basta” Jamás quise hacerte daño Aquella noche de verano. Si no te ame con certeza, Fue el exceso de cerveza y el dolor De saber que no vendrías mas. Y ese amor que por cobarde Nunca pude confesarte, Me carcome la conciencia Por las noches cuando pienso que eras vos La que debería haberme acompañado.. Hasta el final.