He preferido el abismo de las noches negras Cuando la piel huele añeja, agotada Y caer en las veredas, en las calles Cruzando las fronteras asfixiada Es cierto, probé El sabor amargo del fracaso Y de las sombras que Arrugaron mis ombligos Atándome una invisible cinta entre las piernas Sujetando los deseos al olvido Pero verás, no fui Las eventuales coincidencias de tus noches Mis pájaros sacudieron los cimientos del hastío El vuelo me ha llevado hacia otros puertos y caminos A conmoverme el cuerpo Uno a uno Desanclando roles Desaguando ríos