Dime, padre, si en el cementerio
viven los muertos.
Dime, padre, si en los campos yermos,
uno son los dueños
y otros son los siervos.
Dime, padre, si es que yo me muero,
cuando me despierto.
Cookie Consent
This website uses cookies or similar technologies, to enhance your browsing experience and provide personalized recommendations. By continuing to use our website, you agree to our Privacy Policy