Cuento de esas vidas que no pueden disfrutar Como deberían La naturaleza a veces pega por demás Nunca entenderían Pero un destino inquieto los esperará Para curar el dolor de corazones rotos Llueve en ese espacio que no se puede llenar Ni siquiera con la lluvia Buscan la manera de llegar a algún lugar Pero nada les resulta Sin embargo una luz fugaz se vio pasar La cruz del norte guió las almas del destino Y el cielo se abrió, y el viento calmó Cruzando los caminos allá Buscando aquel destino final Con tanto amor (tanto amor) Sintieron la paz con solo mirarse Momento en donde todo cambió Divino destino llegó Allí se cruzó Con una sonrisa dieron cuenta que al final Que ya se conocían Más que suficiente una palabra fue señal Ya no esperarían Y nuevas vidas nacieron para celebrar La cruz del norte guió las almas del destino Y el cielo se abrió, y el viento calmó Cruzando los caminos allá Buscando aquel destino final Con tanto amor (tanto amor) Sintieron la paz con solo mirarse Momento en donde todo cambió Divino destino llegó Allí se cruzó Cuento de esas vidas que ya pueden disfrutar Son almas del destino