Dafne Zuñiga

Laberinto

Dafne Zuñiga


Una cortina de humo, remolino en la cabeza
Tu mirada, el calor y este rio que no cesa
De llevarme, de arrastrarme, arañarme el corazón
Y me deja aquí denuda en medio del callejón
Voy a dejar la puerta abierta de la habitación
Cediéndote terreno, nos esta esperando el diablo
Agazapado en cada rincón, con su dosis de veneno.

Déjame besar tu boca, dame agua de tu piel
Antes de que esta sed me vuelva loca
Quémame en tu infierno, déjame caer.

Le escenografía esta puesta y la hoguera esta encendida
Me estoy quedando desierta y me siento tan perdida
En el abismo de tus ojos, en la desesperación
De sentirte, de tocarte, de arrancarte el corazón
Laberinto de tu cuerpo, laberinto del dolor
Laberinto del deseo.

Déjame besar tu boca, dame agua de tu piel
Antes de que esta sed me vuelva loca
Quémame en tu infierno, déjame caer.