La tarde caía sobre la vereda Tu paso dejaba perfume a jazmín Yo apenas tenía seis años y un perro Con el que salía a verte partir. Me contabas cuentos que nadie sabía Inventabas mundos que siempre busqué Príncipes de arabia, hadas y madrinas Y una melodía que nunca olvidé Pero te fuiste temprano de mi vida Y con los sueños tan sola me quedé Vivo buscando a quien contarle cuentos Para tenerte de nuevo como ayer. No puedo olvidarme cómo eran tus manos Tu suave caricia tocando mi piel Tu voz de murmullo sobre las macetas Para que las plantas pudieran crecer. Tu tierra de infancia estaba encendida En cada comida con clavo de olor Todos los perfumes guardan un secreto Yo escondí el tuyo en esta canción.