Nadie me confesó que era invierno polar Ni que el blanco es color que se pueda rasgar Que el abrigo es más grande que esta ciudad Si la luz no confunde tu forma de andar Y ahora te lanzas y ahora me alcanzas Tu boca es de hielo y la mía se engancha Como una avalancha que arranca la piel Y absorbes el aire y el frío se expande Y anhelas ternura que ofreces a cachos Cuando nadie mira y se puede querer Nadie me confesó que un destello de azar Cambiaría los árboles de esta ciudad Y si el viento acelera mi forma de amar Derretir los glaciares sería ganar Y ahora me lanzo y ahora te alcanzo Tu voz es de vicio, mujer precipicio Si cantas con frases que no sé leer Y observo tus grietas que se abren despacio Y anhelo cordura que ofreces a ratos Cuando se evaporan las horas de más Nadie me confesó que podría viajar De la tierra del hielo al sistema solar