Es tu boca la boca que tiene más dulce sonrisa Y tus manos aquellas que más tiernamente acarician Llevaré para siempre el recuerdo de tu amor Pues eres tu la fiel mujer que vive en mi corazón Y en mi alma perduran las tiernas horas de amor Tuve en tus brazos placer de tus caricias de amor Tan suaves come el rozar de las alas de un ruiseñor Recordá que en un rincón de la sala te exigí Me dieras un beso, y en el me diste tu corazón Una vaga discreta penumbra envolvía la estancia Y yo entonces bebía en tus labios la seda a distancia Pero al fin a tus tiernas caricias no volví Perdóname, ese desdén ya muy caro lo pagué