Venid, alabad al Señor nuestro Dios (x2) Los ríos baten palmas en su honor y los montes revientan de gozo Porque es bueno Yahveh eternamente, infinito su amor entre nosotros Si Yahveh no construye la casa, en vano se cansa el albañil Los que miran al Señor se liberan, el que mira al Señor es feliz El enfermo confía en el Señor y la paz se posará en su corazón