Danzando en la oscuridad
Estabas tú
El viento acaricia tu cuerpo
Y desnuda tu alma
Mi alma se desvaneció
Y en mi cuerpo yo sentí
Una extraña sensación
Que jamás olvidare
Contigo desearía estar
Toda la eternidad
¡hada infernal¡
Recuerdo la noche en la que
La luna nos unió
Tu fuego encendió en mí la llama
Que siempre estuvo apagada
Yo jamás podría olvidarte
Porque contigo la soledad
Desapareció y jamás volvió
Envenenaste mi corazón
De eso que llaman amor
La muerte arrebató de mis manos
Aquella a la que tanto había deseado
Su cuerpo era un templo de luz
Que ardía con fiereza como fuego sagrado
Encantando todo lo que miraba
Con un suspiro a la vida lo retornaba
Conjuros en tus manos guardabas
Sortilegio era tu vos aquelarre de pasión
Coro:
Pero un vil inquisidor
Aprisiono tu corazón
Por temor a caer
En su poder
