Sus ojos se cerraron Y el mundo sigue andando Su boca que ea mía Ya no me besa más Se apagaron los ecos De su reír sonoro Y es cruel este silencio Que me hace tanto mal Fue mía la piadosa Dulzura de sus manos Que dieron a mis penas Caricias de bondad Y ahora que la evocó Hundido en mi quebranto Las lágrimas pensadas Se niegan a brotar Y no tengo el consuelo De poder llorar ¡Por qué sus alas Tan cruel quemó la vida! ¡Por qué esta mueca Siniestra de la suerte! Quise abrigarla Y más pudo la muerte ¡Como me duele Y se ahonda mi herida! Yo sé que ahora Vendrán caras extrañas Con su limosna De alivio a mi tormento Todo es mentira Mentira es el lamento ¡Hoy está solo mi corazón! Como perros de presa Las penas traicioneras Celando mi cariño Galopaban detrás Y escondida en las aguas De su mirada buena La muerte agazapada Marcaba su compás En vano yo alentaba Febril una esperanza Clavó en mi carne viva Sus garras el dolor Y mientras en las calles En loca algarabía El carnaval del mundo Gozaba y se reía Burlándose el destino Me robó su amor ¡Por qué sus alas Tan cruel quemó la vida! ¡Por qué esta mueca Siniestra de la suerte! Quise abrigarla Y más pudo la muerte ¡Como me duele Y se ahonda mi herida! Yo sé que ahora Vendrán caras extrañas Con su limosna De alivio a mi tormento Todo es mentira Mentira es el lamento ¡Hoy está solo mi corazón!