Cuando soñabas Ella se comprará una blusa blanca y le bordará con manos de amor una roja flor en el corazón. Y se la vestirá y frente a la puerta me esperará, con sus ojos tristes por qué te fuiste preguntará. Y yo le contaré paso a paso el cielo por donde fue mi voz oscura bajo mil lunas cantándole. Deja que vuelva, pena en mi pena, deja que vuelva y verás que vuelves a cantar como cantabas cuando soñabas, cuando en las noches tu piel era una torre en el mar de tibia arena, dulce Azucena que dejé sin saber por qué.