Sirenas de barcos se enredan al viento La radio murmura la publicidad Un beso pequeño se posa en los labios La sombra de una caricia Un hilo de Sol se refleja en la cama Triste el espejo, quieto el reloj Palabras secretas, secretas miradas ¿Y cómo poder decirte Que tú eres más que Que el vino, más que el agua, más Que las piernas, que los huesos, más Que las piedras, que la hierba, más Más que algo, más que todo, más Más que el suelo y el tejado, más Que el invierno y el verano, más Que la tapia, más que el patio, más Un poco más Una virgencita fosforescente Flores de plástico, manta bordo Las medias tiradas con gesto indolente Y el día que va pasando La nevera suena en la cocina Y tú canturreas haciendo el café La amarga tristeza de la mañana ¿Y cómo gritarte, amor Que tú eres más que Que el frío, más que el lecho, más Que el cabello, que las manos, más Más que el llanto, que la risa, más Más que cientos, más que miles, más Que el dinero, más que el oro, más Que la tarde, más que el parque, más Que los meses, que los años, más Un poco más Sirenas de barcos jugaban al viento Y tú eras un poco más Más! Más que el grano, más que el heno, más Más que el aire, más que el sueño, más Más que el perro, más que el coche, más Más, más, más ahhh Ahh, ahhh, ahh