(Tonada de la Región de Ñuble, popularizada por Violeta Parra quien la aprendió de su madre, Clarisa Sandoval) ¿Adónde vai, jilguerillo, con ese abreviado vuelo? Anda y llévale un suspiro a la imagen de mi dueña. El otro día en una rama vi cantar un jilguerillo. Me dije: éste es el correo con quien mandé mi suspiro. Cantaba y le pregunté por qué cantaba tan triste. Porque no tuve respuesta del suspiro que me diste.