(Según versión cantada por el conjunto Soporopo) ¡Qué lindo ser voluntario del trabajo solidario! ¡La patria así se levanta y el pueblo trabaja y canta! Ayer encontré a Manuel que cargaba unos saquitos. Estaba también su padre y todos sus hermanitos. Las manos se hacen obreras cuando empieza la faena. Las fábricas le dan vida y también las oficinas. La abuela que amasa el pan, lo reparte presurosa. Le ayudan todas las madres y también la Carmen Rosa. ¡Qué lindo ser voluntario sin pensar en el dinero, ni en la corbata elegante, ni el guante, ni el sombrero! Lo importante es demostrar la fuerza de los chilenos, sean chicos, sean grandes, estudiantes con obreros.