Guapo y varón Y entre la gente de avería Patrón Por tu coraje y sangre fría Impone obediencia Tu sola presencia En toda ocasión Pero yo sé Que el puñal De unos ojos oscuros Ojos cándidos y puros Se clavó en tu corazón Y hoy lloras malevo fuerte Vos qué nunca lagrimeaste Ni aflojaste ante la muerte Súplicas una mirada Vos qué siempre te copaste Sin permiso la parada Ya de audaz no haces alarde Pues te duele la rodada Y aprendiste un poco tarde Que el guapo se vuelve cobarde Y no vale prepotencia Cuando talla el corazón