Robert Tiamo

El Beso

Robert Tiamo


No volviste a llover en el desierto de mi cama
Llegue a creer que fuiste un sueño del que despertaba
Si no por esa foto que te tome descuidada no
Habría ninguna prueba de que sí existen las hadas

No volviste a llover en el desierto de mi cama
Llegue a creer que fuiste un sueño del que despertaba
Si no es por ese beso que te robe descuidada en
La estación de Transmilenio cuando me esperabas

Escribo mi romance y mi drama Como
Gustav Klimt creo que no hay arte sin damas
Escorriste la cortina abriste la ventana
Y tu boca carburaba humo de marihuana

Yo me reía de tus pupilas dilatadas
Consciente de que reías de mis pupilas delatadas
De la nada me pediste que cerrara la ventana y
Me costó desenredarme de tus dreadlocks colombiana

Y comencé a querer más a la pachamama
Me comenzó a gustar tu comida vegetariana
Me acostumbre a la ausencia de maquillaje en tu cara
Porqué según tú, no serías tu si un día te maquillaras

Ahora que te describo es como si pintara
De hecho siento cada rima como una pincelada
Puedo pintar tus manos
Tus cejas no arregladas y el beso tímido de la primera madrugada

Y terminó gustándome el aguapanela y
Terminaste amando la arepa de Venezuela
Estoy tramando pintarte completa en
Acuarela y colocar fragmentos de oro sobre la tela

Puedo pintarte quieta o mientras te vistes
Leyendo cada letra que en el espejo escribiste
Puedo pintar tu cara luego de escuchar mi chiste
O pintar el beso triste con el que me despediste

No volviste a llover en el desierto de mi cama
Llegue a creer que fuiste un sueño De el que despertaba
Si no es por esa foto que te tomé descuidada
No habría ninguna prueba de que sí existen las hadas

No volviste a llover en el desierto de mi cama
Llegué a creer que fuiste un sueño del que despertaba
Si no es por ese beso que te robé descuidada en
La estación de Transmilenio cuando me esperabas

Y terminó gustándome el aguapanela y
Terminaste amando la arepa de Venezuela
Estoy tramando pintarte completa en
Acuarela y colocar fragmentos de oro sobre la tela

Y terminó gustándome el aguapanela y
Terminaste amando la arepa de Venezuela