Otra vez, sin decir nada se marcha de puntillas con el alba, otra vez como una posdata un rastro de carmín sobre la almohada. Yo que intento escapar de esta tortura, de sus curvas y su forma de jugar, yo que juré nunca más pero aunque quiero no aprendo. _ Refrain _ Tu mírame, mírame maldito corazón vivo colgado de sus besos, líbrame de esta absurda obsesión y de la cárcel de su cuerpo. Ella es de esas mujeres que nunca se desnudan hasta el alma, ella es piel de madrugada es frío y soledad cada mañana. Yo que intento escapar de esta tortura, de sus curvas y su forma de jugar, yo que juré nunca más pero aunque quiero no aprendo. _ Refrain _ Tu mírame, mírame maldito corazón vivo colgado de sus besos, líbrame de esta absurda obsesión y de la cárcel de su cuerpo.