Mi calle era de barro y charco agradable Su camino me invitaba a explorar Los celajes lograban que la gente se hable La tierra siempre era un pretexto para ir a jugar Mi calle tenía un cielo más cercano Y había un árbol para cada ilusión El lote que crucé con mis hermanos Me sirvió para aprender toda lección Recuerdo que un buen día alguien detuvo El tiempo y el espacio con sus ojos La llevé a conocer todos mis rumbos Y me olvidé de mis caprichos y mis modos Mi calle me enseñó a soñar despierto En bicicleta declaré mi libertad Era tan fácil tener el corazón abierto En mi calle había tanta humanidad Mi calle era de fútbol y guerritas De la hierba, las Santusas y del pan Del auto que pisó las margaritas De aventuras que jamás se olvidarán Hoy mi calle ya no tiene charcos Y el ruido de los autos no nos deja hablar El cielo cada vez es más lejano Y ya no hay lote donde pueda ir a jugar Hoy mi calle es diferente Ya no hay barro y tampoco hay libertad Ojalá que toda esta nueva gente Se preocupe por sembrar humanidad