El pañuelo blanco de tu mano Se quedó contigo junto al mar Y tu beso breve y hoy lejano Me quemó con su fuego inmortal Y al partir mi barco hacia otras playas Yo no he vuelto a ser jamás feliz Ya que donde quiera que yo vaya Llevo la impresión que te perdí Bella mujer de un país lejano y oriental Es por tu amor, que anclaré y no volveré a zarpar Detendré mi barco peregrino Donde yo aprendí lo que es amar Cambiaré por siempre mi destino y mis ansias de peregrinar Bella mujer de un país lejano y oriental Es por tu amor que anclaré y no volveré a zarpar Que anclaré y no volveré a zarpar