Patricia, reina de la caricia Mar salada que muerde Que te moja de un beso hasta los pies Tenía yo diecisiete Y era músico en un burdel Esto parece una história de cine Pero no lo es Allí me enseñó Patricia La cara oculta del placer Podría haber sido una história de amor Pero no lo fue Tocaba boleros tristes, mientras un tipo con sudor Palpaba el pecho a una rubia, antes de subir al piso dos Por no quedarme en el porno De un mirón a media luz Cedí mi sueldo a Patricia A cambio de alzar mi cruz Después de mojar su cama Y ver mi cara y mi carné Me dijo que era un delito Cobrar a un bebé Y aquella fue la más dulce, en diecisiete primaveras Subiendo cada noche, de dos en dos las escaleras Patricia, reina de la caricia Mar salada que muerde Que te moja de un beso hasta los pies Patricia, playa deshabitada Que en su concha dorada Me metió sin pagar el alquiler El tiempo no pasa en balde Más bien pasa en un avión Y así cumplí dieciocho Apenas cambiar la voz Aquella noche de cumpleaños Patricia preguntó Si quería pagarle con visa O con amor Saqué siete billetes, empapados de sudor Y al día siguiente Patricia, había vuelto al Ecuador