Hay sensación en las casas antiguas de que algo queda de quien las vivió un tibio aroma de café un gesto tierno y familiar manos que aprenden a coser en la inocencia del hogar hay sensación en las casas antiguas de que algo queda de quien las vivió alguien parado en el dintel viendo la vida que se va el laberinto de la fe que nadie puede descifrar vidas que nos rozan que se muestran que respiran vidas en el limbo de las almas suspendidas hay sensación en las casas antiguas de que algo queda de quien las vivió donde el amor prendió una luz un zulo de la intimidad los juegos de la juventud que escapa de la soledad hay sensación en las casas antiguas de que algo queda de quien las vivió el resquemor y la inquietud los ecos de la vecindad el cerco de la multitud alguien que fuma y piensa el mar vidas que nos rozan que se muestran que respiran vidas en el limbo de las almas suspendidas. Há sensação nas casas antigas de que algo fica de quem nelas viveu um quente aroma de café um gesto terno e familiar mãos que aprendem a costurar na inocência do lugar Há sensação nas casas antigas de que algo fica de quem nelas viveu alguém parado em uma janela vendo a vida que se vai o labiritno da fé que ninguém pode decifrar vidas que nos esfregam que se mostram que respiram vidas no limbo das almas suspendidas Há sensação nas casas antigas de que algo fica de quem nelas viveu onde o amor prendeu uma luz da intimidade os jogos da juventude que escapa da solidão Há sensação nas casas antigas de que algo fica de quem nelas viveu o ressentimento e a inquietude os ecos da vizinhança o cercado da multidão alguém que fuma e pensa no mar vidas que nos esfregam que se mostram que respiram vidas no limbo das almas suspendidas