Escucha, yo vengo a cantar por aquellos que cayeron. No digo nombre ni seña, sólo digo compañeros. Y canto a los otros, a los que están vivos y ponen la mira sobre el enemigo. Ya no hay más secreto, mi canto es del viento, yo elijo que sea todo movimiento. No digo nombre ni seña, sólo digo compañeros. Nada nos queda y hay sólo una cosa que perder. Perder la paciencia y sólo encontrarla en la puntería, camarada. Papel contra balas no puede servir, canción desarmada no enfrenta a un fusil. Mira la patria que nace entre todos repartida, la sangre libre se acerca, ya nos trae la nueva vida. La sangre de Túpac, la sangre de Amaru, la sangre que grita libérate, hermano.