Te voy a presentar dos chicas Sodoma y Gomorra (se llamaban las dos) Les gustaba tanto reír Y yo no hacía más que llorar Pero mejor no mirar atrás O terminar como estatua de sal Yo estaba errando por el Desierto Después del rayo de Dios Que quemó todo mi pasado Y partió mi mundo en dos Y así pasé por ese laberinto Que resultó ser tu amor Y yo te necesito tanto No puedo estar sin vos Y yo te necesito tanto Como la luna al sol Y vos estabas vestida de azul En la fiesta del Cazador Y todo el mundo estaba borracho Ardía el humo, sonaba el tambor Y yo te di todos los nombres Que el Profeta me enseñó Y yo era el Hijo del Desierto Y vos la Reina de Corazón Cuando la Noche celebró consejo Para coronarnos a los dos Pero todos tus viejos amantes irrumpieron en la habitación gritando Yo te necesito tanto etc.