Me invade la intuición de la mañana y el temblor de una hoja en una esquina, Peces azules nadan y me asombran, saludo a una gotera en la cocina. El periódico mancha mi día de tristeza. Tu recuerdo libera mi ternura. Invento que es verano y que te tengo, porque leo un poema llueve en tu cintura. Y como el mar me regalas sal y yodo. Tu nombre está escrito en mí de algún modo, Y así te tengo en todo, (o en casi todo)