Vuelve a cantar, vuelve a cantar, que el tiempo se nos va. Canta otra vez, canta otra vez, que el tiempo se nos fue. Soñé una vez que había un reloj colgando en el vacío que recogió como un imán todo el tiempo perdido. Era el tiempo mi obsesión, mi entraña, mi castigo. Era el tiempo, no el amor, cantando en mis oídos su canción. Pero una vez sentí crecer el día junto conmigo, y fue esa vez que lo atrapé con los cinco sentidos. Era el tiempo, corazón, más largo que el olvido. Era el tiempo del amor cantando en mis oídos su canción. El tiempo se nos va, el tiempo se nos fue.