Siempre hay un hombre atrás de la línea, solo para cruzarla a tiempo. Y el cafe de la esquina cobra una hora o dos a tiempo. Y si termina el día es mas frío, Si comienza, todo se calienta, En la cocina los insectos no me dejan en paz Y quieren más de mis alimentos. Siempre hay una señora en la esquina De la casa de cosas viejas, Tengo frío, me detiene la voz, Y más temprano quiero despertar, Un jugo más de zanahoria, En la cabeza un litro de cerveza, En la cocina el refrigerador empieza a sonar... Es hora de compartir el almuerzo, Es hora de respirar, caminar tirando al rio piedras rojas. Siempre hay una señora en la esquina en la casa de cosas viejas… Es hora de compartir el almuerzo, Es hora de respirar, caminar Tirando al rio piedras rojas. Es hora de descubrir si quiero o no cruzar La línea que siempre está en todas partes, en todas partes…