Nacha Guevara

Guardería

Nacha Guevara


Hoy vino el patrón
y nos dejó su niño
Casi tres horas
Nos dejó su niño. 
Indefenso, sonriente y millonario, 
Un angelito gordo y sin palabras. 

Lo sentamos allí, 
Frente a la máquina
Y él se puso a romper su patrimonio. 
Como un experto desgarró la cinta
y le gustaron efes y comillas. 

Nosotros, satisfechos como tías, dejamos que haga y que deshaga. 
Por suerte ya la máquina está rota. 
Después de todo, el niño es un encanto.
Sólo dice "Papá". 
En diciembre dirá "Está despedido, no sea idiota"