Son las diez de la mañana Cruzo la puerta apurada del juzgado viente tres Siento un nudo en la garganta Y una lágrima de tantas ya corre sobre mi piel Tengo miedo de encontrarlo Siento ganas de abrazarlo de preguntarle por qué Pero una voz que me llama por mi nombre y su apellido Me pone delante de él Cuando él me mira a los ojos Yo siento que aquel enojo ya no existe entre los dos Porque el amor es más fuerte pero estamos frente a frente De un señor llamado Juez que ignora lo que sentimos Porque un día decidimos pedir la separación Pero eso fue un mal momento, un tiro en los sentimientos Que casi mató a los dos Cómo puede señor Juez, usted que ha estudiado tanto No reconocer el llanto de dos que se quieren tanto Ante Dios y frente a usted Cómo puede señor Juez Solamente en un segundo cambiarle a la vida el rumbo Y acabar con nuestro mundo Con su firma en un papel Cuando él me mira a los ojos, yo siento que aquel enojo Ya no existe entre los dos Porque el amor es más fuerte pero estamos frente a frente De un señor llamado Juez Que ignora lo que sentimos porque un día decidimos Pedir la separación Pero eso fue un mal momento Un tiro en los sentimientos que casi mató a los dos Cómo puede señor Juez, usted que ha estudiado tanto No reconocer el llanto de dos que se quieren tanto Ante Dios y frente a usted Cómo puede señor Juez Solamente en un segundo cambiarle a la vida el rumbo Y acabar con nuestro mundo Con su firma en un papel Cómo puede señor Juez, usted que ha estudiado tanto No reconocer el llanto de dos que se quieren tanto Ante Dios y frente a usted Cómo puede señor Juez Solamente en un segundo