Poesías rotas, solas las quimeras Un baño de humo, agoté las advertencias Mares que se encuentran y vomitan luz Mutan las maneras para despeñar cabezas Rabia contenida en el marco del recuerdo Escupo saliva y alimentó al pescador Gira y giro con mis dedos un planeta que ya enfermo Me pregunta si aún los ríos mueren en el mar Yo, que siempre te cuidé, desconozco tu mirar Despreciaste mi amistad, y ahora me rogarás Por un sitio sin olor, donde liberar lamentos Por un árbol que del sol proteja tus últimos besos Grito, ¡no! Y verás, que la noche nunca te dio tanto miedo Dormirás, paralíticos tus sueños se despertarán Sentirás al silencio estrellarse contra el suelo Pero sigues vivo y las cadenas mías son Tendencias a cortar las venas en silencio Promesas que se guardan donde duerme el sol Más allá hay corazones que no paran de sufrir Entre pakistán y el cielo, dejan de latir A ti, que heriste mi piel, te devuelvo el favor Entre los que amaste administra restos de aire natural Y si huyes, correrás por mi reino nuclear Y aunque arda lo que tanto amé Grito, ¡no! Y verás que la noche nunca te dio tanto miedo Dormirás, paralíticos tus sueños se despertarán Sentirás al silencio estrellarse contra el suelo Pero sigues vivo y las cadenas mías son Y verás que la noche nunca te dio tanto miedo Dormirás, paralíticos tus dedos se despertarán Sentirás al recuerdo golpeando con desprecio Y aunque sigas vivo las cadenas mías son Lágrimas de la memoria, uranio en los besos El cadáver de la luna arañando el ataúd