Pueblo escucha con atención Porque servimos a nuestro Dios Fue por su sangre que por amor Nos redimió de condenación Manos dispuestas quiere el señor Con mucho esfuerzo y dedicación Pies presurosos a laborar Con regocijo y felicidad Servid a Cristo de corazón Pues él conoce toda intención No te detengas hay que ofrendar Mira las almas se pierden ya Permaneced firmes y constantes Perseverando en la oración Porque el trabajo en Dios no es en vano Y os premiará y dará un galardón