Antes que nazca el día los pájaros del monte nos dan sus melodías, los güises y zenzontes, el picotear sonoro de un carpintero se oye, que en la punta de un árbol su casa construye, donde va a vivir, y un gorrioncillo salta de una rama a otra, muy cerca de allí. Como estos pajarillos hoy te canto, Señor, pidiéndote nos unas en fuerza y amor, te alabo por mil veces porque fuiste rebelde, luchando noche y día contra la injusticia de la humanidad, luchando noche y día contra la injusticia de la humanidad. Mil campesinos unidos te cantamos, bajamos de los cerros con nuestras alforjas repletas de amor, por ser el pencón, el pencón, el guía y justiciero, por ser el tayacán, el tayacán de mi pueblo entero, por ser el tayacán, el tayacán de mi pueblo entero. Canten pijules, zanates y pocoyos, vengan los chichilotes, los saltapiñuelas y el alcaraván que cante el colibrí canarios y chocoyos juntos con el macuá, cua, cua, cua, canten felices todos, juntos con el macuá, cua, cua, cua, canten felices todos, juntos con el macuá, cua, cua, cua, canten felices todos.