Niño de todas las mañanas Dibuja sus manos No quiere decir Ojos de las tardes en calma Ojos que alejan hasta volver Oboi Nube que no late sin el viento La ilumina la estrella fugaz No hay terror en él Hay solo vida Vida sin preguntas y sin ayer Oboi Ya no alcanzan las horas de mi tiempo Él sabe las mareas que volverán Ya no hay eco en este cielo alto Solo que su grito Es un rayo que escapa Si la luz iluminara un día Nombraría tu vida, tu vida Solo el tiempo lava las heridas Y la inmensa noche vuelve a ser luz Oboi Ya no vemos más que las sombras No hay señal que lo traiga aquí Y si vuela libre y es blanco de una honda Todo se apaga empieza y termina Hoy escucho todo en tu silencio Voces y miradas de un mundo que fue Pesa más tu espera que mi apuro Y he de estar siempre aquí Siempre hasta morir